sábado, 21 de febrero de 2015

LIZARD, para saber más.

Giuliano Passignani

         En los primeros años después de la guerra,  aparecieron en Italia los primeros Lizard y solo algunos criadores los tenían. En aquel tiempo yo solo tenía un conocimiento literario.  A principio de los años sesenta del siglo pasado, pude conseguir algunos Lizard: tres machos dorados, dos hembras plata y otra hembra azul. Los machos y las dos hembras plata estaban coloreados de rojo.


         Los hermanos Grilli, canaricultores de Florencia conocidos en todo el mundo, durante uno de sus viajes a Inglaterra me consiguieron los Lizard y dos Scotch Fancy blancos. Son cerca de cincuenta años que llevo criando Lizard que, a diferencia de las demás razas de canarios, es el único que no ha sufrido variaciones morfológicas a lo largo de su existencia.
         Los primeros Lizard que llegaron a Italia no gozaban  de buena salud, tenían el abdomen enrojecido y no eran los óptimos reproductores y criadores que son actualmente.
         De los primeros Lizard que tuve, al año siguiente a su llegada, solo dos seguían con vida: las dos hembras plata.
         En aquel tiempo, años 60,  los criadores de Lizard en Italia eran muy pocos y no existía ninguna relación ni contacto entre ellos que permitiese intercambiar ejemplares; por ello acoplé las dos hembras Lizard plata con dos canarios de color verde, hoy llamados amarillo negro.
         Durante la puesta de los huevos una de las hembras Lizard murió, la otra hembra crió cinco pollos. Los canarios nacidos de esta hembra eran de color verde corriente, con patas y pico de color carne, y sobre la nuca y vértice de la cabeza tenían una pequeña mancha de lipocromo.
         El año siguiente, en 1963, tenía los extraños canarios verdes y la hembra Lizard y realicé los siguientes emparejamientos: madre con uno de sus hijos y un par de hermanos. De estos cruces salió una descendencia extraña: algunos verdes como sus padres, siempre muy atípicos, otros muy similares a los Lizard, pero que tenían muy poco color de fondo, el plumaje no era típico del Lizard, sino un plumaje más duro, aunque el color del subplumaje no era negro, sino un gris oscuro; el color lipocromo del casco, casi todos incompletos, era amarillo muy claro, casi blanco.



         Además, una buena parte de estos casi Lizard tenían pequeñas manchas de lipocromo sobre el cuerpo o en las plumas primarias. Después de dos años, siempre a través de los hermanos Grilli, logro de nuevo tener otros Lizard con lo que comienzo la verdadera cría de esta raza de canarios.
         Una hembra Lizard, nacida del emparejamiento de la madre Lizard con uno de sus hijos verdes, se puede ver en la primera edición del libro “Canaricoltura” del amigo profesor Umberto Zingoni, es una hembra plata con el casco casi perfecto, con patas y pico de color carne y con escasísimo color de fondo.
         En años sucesivos he notado con satisfacción que el Lizard había  mejorado mucho, en particular en salud y por lo tanto como óptimos reproductores. Por este último motivo decidí emparejar algunos Lizard con canarios de color amarillos con el fin de obtener nodrizas para criar Crest, Yorkshire y Norwich. Con asombro me he dado cuenta que algunos de estos canarios “bastardos” tenían parte el diseño del dibujo melánico del Lizard. Este hecho me sorprendió mucho, y aun hoy discutimos en muchas reuniones nuestro asombro por su comportamiento genético: recesivo con las melaninas y dominante, en la parte melánica, con el lipocromo.
         El Lizard es la única raza de canarios que no ha sufrido ninguna variación en su estándar; únicamente el antiguo diseño se ha cambiado por uno nuevo para tener más redondez en el cuerpo. Ciertamente, en los últimos años, el Lizard ha mejorado mucho, los ejemplares son más típicos y más próximos al canario ideal.


         En los primeros libros de criadores ingleses, cuando hablaban de las características del Lizard, y en particular de los rowings, decían:  a menudo no están bien formados y son poco visibles, solo algunas hembras plateadas los tienen bien marcadas y separadas; en los dorados faltan en el medio del pecho. En los Lizard macho están casi ausentes, solo en los plata son apenas perceptibles en los costados.  Actualmente, en un alto porcentaje de Lizard, el problema de los rowings no existe; la selección hecha con inteligencia y mucha paciencia ha dado sus frutos.
         Hoy puede decirse que aparece claramente lo que se llama “efecto Lizard”. En todo el cuerpo se notan las escamas bien hechas, los rowings muy claros, las coberteras tal como exige el estándar y pequeñas escamas en el cuello y cabeza cuando falta el casco.
         Estando así las cosas parece que no se debe hablar más del Lizard. Cuando una raza de canarios ha alcanzada un nivel óptimo del estándar es un error no hablar más, pues se corre el riesgo de un posible decaimiento con lo que habría que volver a hablar de ello.
         Durante muchos años, durante mi larga experiencia en la cría del Lizard,  he controlado siempre el plumaje desde el pecho hasta la cloaca. A menudo me he dado cuenta que en esta zona el plumaje tenía una coloración muy clara, coloración que no era solo debida a la escasa calidad de color del lipocromo, sino también a una pequeña mancha lipocrómica (que tenía una  buena parte de mis Lizard).



         Este defecto –es justo llamarlo así – también está presente en otros criaderos de Lizard. Para mejorar el diseño desde el pecho hasta la cloaca, en mi criadero y en el de otros amigos, hemos descartado los ejemplares con la mancha de lipocromo y los resultados, en poco tiempo, han sido visibles, ha desaparecido la claridad y en los mejores ejemplares los rowings son regulares y completos. De este problema del Lizard no se había hablado, solo en algunas ocasiones se ha hecho… Los actuales Lizard están muy próximos al estándar, pero algunas veces se ven ejemplares que solo tienen los rowings en los lados y que se presentan como largas tiras continuas de eumelanina negra y bruna.


         Este defecto lo encontramos también en las escamas, el color avellana oscura o marrón rojizo prevalece claramente sobre el negro, las escamas tienen así un doble color y las plumas de las coberteras carecen en la parte interior del color negro.
         Cuando el canario Lizard tiene mucha eumelanina bruna las patas son claras y en los mejores canarios muy poco brunas cuando se exponen al sol. Este defecto se elimina con la selección, retirando de la cría aquellos ejemplares con demasiado bruno y a los que tienen claro el bajo pecho. El color de fondo será el primero en beneficiarse.


         El color de fondo amarillo mezclado con la eumelanina negra, queda siempre con una tonalidad amarilla y todo el diseño negro queda bien señalado, nítido, destacándose claramente del color de fono. Pero cuando el color de fondo amarillo se encuentra con un diseño con mayoría de bruno, el color y el diseño se mezclan entre si y cogen un color de hoja muerta y el diseño no se destaca bien del fondo lipocrómico.
         Cuanto he escrito anteriormente no es mera teoría, sino que es el resultado de muchos años de criar muchas razas de canarios, especialmente el Lizard, que sigue siendo mi favorito.

         

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