Criar Lizards no es para todos

Giuseppe Cattaneo

         Este artículo mío puede no ser apreciado por algunos criadores de Lizards.

         Comenzar a criar con propósitos ambiciosos solo se puede hacer después de consultar a criadores que tengan experiencia con el Lizard.

         Recuerdo de un modo particular una exposición regional en Milán durante la cual se encuentra con un inteligente criador de Lizards, que para mí fue un maestro, además de un amigo, porque me enseñó las cualidades y defectos  que podían tener este esplendido canario. Su nombre era Arturo Nava y de él conservaré siempre el recuerdo de su ayuda.

         Volviendo a las particularidades de este canario, puedo decir que está claro lo que se dice respecto a la alimentación, pero las cosas no están tan claras en lo que se refiere a los emparejamientos.

          Crio con 12 parejas y pienso que para conseguir coronillas perfectas se debe emparejar un macho y una hembra con coronillas perfectas siempre que sean uno intenso y el otro nevado y nunca que sean los dos intensos o los dos nevado ya que haciendo este tipo de emparejamientos los resultados son imprevisibles.

         En lo que respecta al emparejamiento se debe procurar que no haya peleas, y una cosa que es obvia: que los ejemplares estén en perfecto estado de salud, basta que uno de los dos ejemplares no esté en perfectas condiciones para que la cría sea un fracaso. Mi experiencia en la cría siempre me ha dado un 50% de éxitos y un 50% de fracasos.

         Todo criador debe tener constancia y paciencia para poder llegar a las metas deseadas.

         Otro consejo que considero básico es que si se quiere obtener una descendencia homocigota (que hay que revitalizar parcialmente en el futuro) hay que realizar el emparejamiento que realizan los ingleses (endogamia o consanguinidad estrecha) Insisto en que todo buen criador debe hacer esto.

 

         Personalmente, con mi gran experiencia, tengo por norma cuando hago las parejas tener muy presente que no tengan ninguna pluma clara además de las del casco; de hecho el Lizard es un canario melánico. Un macho Lizard plata tiene el subplumaje gris claro que es casi claro en el vientre y en los flancos, defectos que afectan a los Rowings o a los Spangling. Todo esto lo hago para evitar que las manchas lipocrómicas en el plumón entren a formar parte del patrimonio genético de mis canarios, ya que están muy presentes en la mayoría de los Lizards.

         Quisiera también señalar un problema encontrado a menudo con este hermoso canario: no debería ser objeto de hibridaciones, como ocurrió con la obtención del Lizard Azul que, hace varios años, se obtuvo en Inglaterra con el emparejamiento Lizard X Border Blanco, hibridaciones que dieron algún ejemplar  destacado.

         Hoy, sin embargo, hay que decir que los Border blancos casi no se ven, siendo muy escasos en las exposiciones de  canarios; por esto, para conseguir el Lizard Azul se empezó a utilizar el blanco dominante o recesivo (de los canarios de color), con lo que se introdujo en un canario de características melánicas el factor lipocromo blanco que no tiene nada que ver con el plumaje del Lizard.

         Con esta crítica mía solo quería aconsejar a los criadores que quieran realizar estas hibridaciones que se lo adviertan a los posibles compradores, pues de no hacerlo habría que empezar todo el proceso selectivo del Lizard de nuevo.

         Creo que criar Lizard no es cosa fácil, no es cosa de todos: este es el motivo por el que intento ayudar a los que se inician en la cría de esta raza.

         Personalmente pienso que defender la raza es algo que corresponde a todo criador que ame al Lizard y que debe divulgarlo y defenderlo entre la nueva generación de canaricultores.

         De hecho, las características de este canario, que es la raza más antigua, son un estímulo, aunque los antiguos criadores ingleses se han llevado a la tumba (diría que egoístamente) todos los “ingredientes” para poder mantener las características particulares durante tanto tiempo sin que la raza sufriese ningún daño, cosa que sí se hace hoy. Para ser sinceros, buscamos la creatividad (y la innovación)  trabajando con unos ejemplares de los que no conocemos nada con seguridad. 

También tengo que decir que en este último año he eliminado los fármacos (elogiados por muchos). El motivo es que es mejor prevenir que no llevar el sano al veterinario (es mejor prevenir que curar). Puedo asegura que una buena dieta, una limpieza a fondo y un ambiente adecuado son la mejor medicina que hay.

         Concluyo con la esperanza de que las cosas de las que he hablado sirvan de reflexión para los que quieran comenzar.