sábado, 15 de febrero de 2014

HETEROGENEIDAD EN EL LIZARD

Artículo aparecido en Italia Ornitológica en 1993 y del que es autor G. Passignani.

La calidad del plumaje y el diseño único en su género, han hecho del canario Lizard una joya viviente. Los distintos apartados del estándar parecen todos esenciales para señalar las  características de este canario, características que difícilmente, por no decir utópicamente, se manifiestan a la vez en un único ejemplar.
 En el Lizard plata, en el que el dimorfismo sexual está bien presente, vemos que el lipocromo (amarillo, blanco o naranja) con todos sus matices, se manifiesta más acentuado y extenso en todas las partes del cuerpo del macho. Al contrario, los rowing de la hembra llegan a la mayor calidad que se puede alcanzar.
       En el Lizard dorado el dimorfismo sexual es imperceptible, salvo una ligera zona más clara a los lados del pico y mejillas en los ejemplares muy típicos.
Lamentablemente en el Lizard dorado, a menudo la intensidad del lipocromo requerida en el estándar (en grado máximo para dar la máxima luminosidad al plumaje) tiene una ligera nevazón que se manifiesta en el extremo de las plumas de la espalda como una ligera media luna lipocrómica de color blanquecino.
  En las hembras, esta ligera nevazón es más frecuente, con lo que gana el diseño de los flancos y el pecho, y el dimorfismo sexual es más evidente.
En el Lizard no se requiere una tonalidad precisa del lipocromo, pero este color de fondo debe tener una tonalidad limpia que haga resaltar al máximo el diseño. Un color apagado hará que el diseño aparezca opaco y como ahumado o borroso.
Las plumas no deben ser ni demasiado largas ni demasiado anchas para no originar un plumaje abierto y descompuesto, ni unas escamas ni marcas en el pecho demasiado grandes.
      Y habiendo colores de tonalidades diversas, plumajes demasiado largos, y lo que es peor, una cierta nevazón en los dorados y mucha nevazón en los platas, todo lo cual origina una gran diversidad que provoca una cierta confusión, acrecentada por el hecho de que el canario que vence en Bolonia, es diferente del que gana en Milán, aunque sean ambos pájaros de calidad.
El hecho es que los puntos necesarios para ganar pueden estar repartidos de diferente manera. Por ejemplo, un Lizard dorado con -2 en las escamas, -1 en el color de fondo, -1 en el plumaje y -2 en el pecho, para un concurso es igual que otro dorado que tenga -3 en las escamas, -2 en el color de fondo, -1 en el plumaje y 0 en el pecho.
Este ejemplo no quiere ser una excusa para los jueces, pero a menudo es la pura realidad.
Para superar los hechos mencionados anteriormente hay que estar muy atentos en el proceso de selección. Trate de obtener Lizard oro sin esas pequeñas escamas blancas en la espalda (más que escamas se debería hablar de zonas nevadas en el borde de las escamas) que oscurecen el brillo del color de fondo; y en los Lizard plata hay que buscar ejemplares con unas escamas de pequeñas dimensiones, plumaje corto y poco ancho y al mismo tiempo con un fuerte color de fondo. En otras palabras, hay que hacer los acoplamientos siguiendo los mismos principios que los canaricultores de color.
Las restantes partes del diseño del Lizard pueden ayudar a los criadores más fácilmente a producir Lizards más similares entre sí.
Las alas y la cola deben estar bien colocadas y no tener ninguna pluma clara ni partes claras en los extremos, cosa muy importante.
Deberán tener una coloración lo más oscura posible (negra) y con el margen periférico dibujado de color bruno. Los Lizard con alas y cola muy oscuras tendrán las cejas bien visibles, y el pico y las patas muy oscuras. Todo esto es debido a la capacidad de aumentar en el plumaje la eumelanina a expensas de la feomelanina.
Si los criadores hacen este tipo de selección, en ambientes bien iluminados de luz natural (no es necesaria la acción directa del sol, pues origina un plumaje de peor calidad) tendrán resultados muy satisfactorios y podremos ver Lizard en las diversas exposiciones muy similares entre sí.

G. Passignani.